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domingo, 9 de marzo de 2014

..arenas movedizas..

¿Has llegado a sentir esa sensación de que te estás "hundiendo" en una situación sin poder hacer nada, y si haces algo, más te "hundes"?
 
¿Has llegado a pasar por momentos difíciles en que quisieras decir lo que sientes pero no te atreves por pensar en el problema que puedas causar?
 
Es como si estuvieras en arenas movedizas..
 
"Al principio todo parecía ir bien, nos manifestábamos nuestro amor mutuo, nos divertíamos juntos, hacíamos planes para todo, confiábamos el uno al otro. Había diferencias, nos llegábamos a molestar de vez en cuando, pero siempre pensé que sólo eran circunstancias pasajeras.. Poco a poco, nuestros defectos personales y la desconfianza entre nosotros hicieron que aparecieran el desamor, las agresiones, la violencia, la falta de respeto.. Sentí como si me estaba hundiendo en arenas movedizas, pues todo lo que dijera, o lo que pensara, lo que hiciera, me hacían sentir que en lugar de salvar o mantener nuestra relación, me hundía más rápido.."
 
En nuestro corazón y nuestros sentimientos, las "arenas movedizas" tienen forma o dan la apariencia de "tierra firme", o de un lugar "seguro", o incluso espacios "atractivos", pero finalmente pueden resultar las trampas perfectas.
 
Pero, ¿cómo entender que el espacio sentimental, de la desconfianza, de la incomprensión, de la falta de apoyo, del desamor, de la falta de respeto, la tristeza, la depresión, etc., no son mas que simplemente los espacios de "arenas movedizas" por donde debemos transitar y aprender a salir de ellas?
 
¿Cuántas personas hemos sufrido la pérdida de un ser querido y pareciera que nos encontramos en las "arenas movedizas" de la depresión y la tristeza, en las que por más esfuerzos que hacemos desesperadamente por salir, sentimos que más nos hundimos?
 
Quizá el estado en que se halla la naturaleza humana actualmente se asemeje más a terrenos de arenas movedizas por la falta de seguridad en nosotros mismos, por la constante lucha entre nuestros valores humanos, espirituales y materiales, por el deseo de poder, por la inminente pérdida de confianza en los demás y la falta de una comunicación efectiva.
 
"Quisiera decirte tantas cosas que siento pero no me atrevo, pues pienso que podría perderte para siempre.."
   
Las "arenas movedizas" atrapan nuestros sentimientos y nuestros pensamientos, hacen que surjan nuestros temores, nuestras debilidades, y se apoderen de nuestra inseguridad. 
 
"Si te expreso lo que siento, seguramente te enfadarás y te alejarás aún más; pero si no te digo nada, pensarás que ya no me importas y seguirás alejándote cada vez más.."  
 
Es un círculo vicioso del que es complicado salir mientras no tengamos conciencia de nuestras capacidades, de nuestros valores y nuestra inteligencia.
 
Sabes? Tal vez la vida misma es una gran "arena movediza" donde a diario luchamos por salir adelante.

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